Anticuerpos TRAB (Receptor TSH) altos

No se habla mucho de los anticuerpos contra al receptor de la TSH. Los anticuerpos TRAB están presentes en más del 70% de casos de hipertiroidismo autoinmune o enfermedad de Graves.

En un principio se pensaba que solamente estimulaban a la glándula tiroides pero tienen la capacidad también de bloquear la acción de la TSH e impedir o perjudicar la producción de hormonas tiroideas.

Los anticuerpos TRAB o contra el receptor de la TSH pueden unirse a uno de los epitopes (fracción) del receptor de la TSH y cambiar su actividad.

Suelen ser inmunoglobulinas que no paran de estimular a la glándula tiroides incluso con niveles de TSH suprimidos y sin responder a la acción del hipotálamo o la ACTH.

Como es lógico, la costumbre sería dejarnos engañar por las falacias de la tradición médica que siempre apuesta por la firme creencia de que estos problemas son a causa de un sistema inmunitario hiper excitado que ataca por error nuestras células.

Solamente tenemos que recurrir a las lecciones básicas de inmunología, que nos dicen que este anticuerpo es una inmunoglobulina IgG. Es la más abundante en los fluidos internos del organismo y se incrementa ante el ataque de un virus o bacteria.

Ya sabemos por donde van los tiros.

Muchas personas con hipertiroidismo sufren las secuelas en ocasiones de un virus latente en su sangre o una bacteria escondida en su colon, hígado o riñón que son los responsables de esa sobreestimulación sobre el receptor de la TSH.

Los niveles altos de IgG se controlan regulando el sistema inmunitario y expulsando a los parásitos que están conviviendo contigo.

Secuelas de una varicela o sarampión mal curados, la mononucleosis, la Borrelia, candidiasis, la hepatitis y los problemas hepáticos fomentan los altos niveles de IgG que interaccionan con el receptor.

Los anticuerpos TRAB son básicamente una consecuencia del ataque de un parásito, bacteria o virus no identificado.

Si te medicas con antitiroideos para reprimir a tu tiroides sin comprobar si estos anticuerpos están elevados o sin hacer un buen protocolo de desparasitación estás jugando a la ruleta.

Si has sido diagnosticado/a con Hashimoto y tienes bocio, chequea los anticuerpos contra el receptor de la TSH porque pueden estar relacionados con la hipertrofia de la glándula o la tiroiditis atrófica. En esta última afección la tiroides reduce notablemente su captación de yodo.